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El reconocido activista conservador Charlie Kirk, de 31 años, murió tras recibir un disparo mientras participaba en un evento universitario en Utah. El hecho ocurrió el miércoles, cuando Kirk respondía preguntas del público en la Universidad del Valle de Utah (UVU), frente a unas 3.000 personas. El ataque sucedió alrededor de las 12:20 del mediodía.
Según testigos y videos difundidos en redes sociales, el disparo impactó en el cuello de Kirk, lo que provocó pánico entre los asistentes, quienes huyeron del lugar. El activista fue trasladado en un vehículo particular a un hospital cercano, pero horas después se confirmó su fallecimiento.
Las autoridades presumen que el atacante disparó desde el techo del Losee Center, un edificio ubicado a unos 130 metros de la zona donde Kirk estaba sentado. Imágenes de seguridad muestran a una persona vestida de oscuro corriendo por los tejados tras el hecho.
El FBI informó que se halló un fusil de cerrojo en un área boscosa cercana al campus, junto con huellas de calzado, palma y antebrazo que podrían pertenecer al responsable. Aunque dos personas fueron interrogadas, no se han realizado detenciones.
El sospechoso, descrito como alguien de “edad universitaria”, logró camuflarse entre los asistentes antes de escapar. Por ahora, la oficina del FBI en Salt Lake City difundió fotografías de una “persona de interés” y ofreció una recompensa de hasta 100.000 dólares para dar con el autor del crimen.
El asesinato de Kirk, cercano al expresidente Donald Trump y figura influyente dentro del movimiento conservador estadounidense, ha generado gran conmoción política y social en el país.
