INFRAESTRUCTURA
En 2015, el gobierno de Rafael Correa presentó el proyecto de las Escuelas del Milenio, que prometía revolucionar la educación en Ecuador con 200 nuevas unidades educativas en todo el país. Sin embargo, casi una década después, el plan ha quedado en ruinas, dejando una serie de problemas que persisten hasta el día de hoy.
De las 200 escuelas prometidas, solo 70 fueron construidas, y muchas de ellas se encuentran en estado de abandono o con graves deficiencias de infraestructura. El fracaso de este proyecto no solo afecta a la calidad educativa, sino que también ha dejado una millonaria deuda que sigue pesando sobre el Gobierno actual.
El contrato firmado en 2015 entre el Ministerio de Educación y la empresa China Railway No. 9, por un valor de 196 millones de dólares, contemplaba la construcción de las 200 Escuelas del Milenio. Sin embargo, las promesas no se cumplieron.
Solo 70 escuelas fueron entregadas, y de estas, 22 son las únicas que aún operan, mientras que el resto enfrenta múltiples problemas, desde infraestructura deteriorada hasta saqueos.
La empresa china demandó al Estado ecuatoriano por incumplimiento de contrato, y en 2018, el país fue condenado a pagar 85 millones de dólares debido a vacíos en las especificaciones técnicas del acuerdo original.
Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), elaborado en 2019, dejó en evidencia los problemas que aquejan a las Escuelas del Milenio.
El estudio reprobó la calidad de los planteles y su modelo educativo, destacando que no alcanzaron los estándares de infraestructura, aprendizaje ni resultados académicos esperados.
Con un costo de aproximadamente 500 millones de dólares en la última década, el proyecto no solo fracasó en su propósito inicial, sino que dejó una deuda millonaria y una serie de escuelas en condiciones que difícilmente podrán ofrecer una educación de calidad.
