TURISMO.-
Las diferentes caídas de agua y termas que brotan de la mama Tungurahua, forman parte de hermosos paisajes que atraen a los amantes de la naturaleza a visitar Penipe. El Ojo del Fantasma, se ha convertido en el lugar predilecto de turistas nacionales y extranjeros.

Ubicado en la parroquia Puela del cantón Penipe, este enigmático lugar durante los últimos años se ha convertido en uno de los sitios favoritos de cientos de aventureros que, cansados de la monotonía y el ruido de la ciudad, acuden en busca de tranquilidad y renovar sus energías, pues sus paisajes, pintorescas cascadas y la diversidad de flora y fauna la hacen única. Se preguntarán si su acceso es complicado o únicamente su sendero está destinado para experimentados exploradores, pues la respuesta es no. Para llegar a esta cascada hay dos rutas en la vía Penipe-Baños: una, por la parroquia Puela, y la otra por la parroquia El Altar. Los dos caminos convergen en un puente sobre el río Puela, donde un letrero anuncia el tramo de las cascadas con indicaciones para recorrerlo.