La presencia de 10 provincias con sus productos permitió que la ciudadanía conozca el trabajo de la Iglesia.
En una caminata desde el Centro Agrícola a las 10h00 y la concentración en La Catedral, participaron pequeños productores orgánicos de los tres sectores del país, Sierra, Costa y Oriente.
El objetivo de esta actividad, que estuvo encabezada por la Diócesis de Riobamba, la Pastoral Social y Caritas, es socializar la producción agroecológica y llegar a la sensibilidad de la población para que se pueda consumir alimentos saludables.
Quienes trabajan la tierra merecen contar con un espacio de comercialización; cultivan pequeños lotes de terreno y quieren ofertar productos sanos, sobre todo que obtengan precios justos, eso beneficia a los agricultores y a los consumidores, señaló el padre Rolando Guanga, director de la Pastoral Social de la Diócesis de Riobamba.
Monseñor Julio Parrilla, Obispo de la Diócesis de Riobamba, fue el encargado de inaugurar el evento, que consistió en la exposición de los productos, caminata de los agricultores y una serie de conferencias y socialización de las actividades que desarrollan en cada una de las diez provincias, que tuvieron sus representantes en el evento que se desarrolló ayer y que tuvo como su principal objetivo multiplicar la producción y consumo responsable, expendio con precios y peso justo.
Señaló además que la Iglesia debe estar presente en la vida de su pueblo, no es solamente la misión de la Iglesia rezar, “claro que hay que rezar porque debemos estar bien conectados con Dios, pero es bueno mantener la solidaridad, de la fe, forma parte el compromiso social. No podemos vivir solo mirando al cielo, hay que mirar la tierra que pisamos y hay que pisarla bien para no hacer daño y al mismo tiempo que sea lo más productiva generosa, amigable y amable con todos nosotros”.
El Obispo aprovechó el espacio para expresar su solidaridad con lo que está ocurriendo con los compañeros periodistas que fueron secuestrados. “Cuesta reconocer la verdad, pero tenemos que prepararnos para lo peor, pero no tenemos que quedarnos en lo peor, hay que luchar, trabajar, seguir adelante y pidiéndole a Dios que el futuro de nuestra Patria no pase por la sangre, la muerte o por el terror, sino que sea un futuro de vida, de democracia y solidaridad”. (09)