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Administradores y voluntarios del albergue canino, hacen un llamado a la solidaridad. El centro que alberga más de 200 mascotas necesita insumos y varios materiales para atender a los peluditos rescatados en diferentes partes de la ciudad.
200 perritos que algún día tuvieron un hogar, y que fueron abandonados, hoy tienen un techo donde protegerse del frío, comida, cuidados de salud, y, sobre todo, el amor que quizá nunca recibieron. En la actualidad, esa tranquilidad se encuentra en riesgo, debido a que este centro atraviesa una terrible situación, debido a que la colaboración que reciben ha caído drásticamente.
La mayoría de estos animalitos de entre tres meses a 10 años de edad requieren cuidados que tiene altos costos económicos. Por ejemplo, en el espacio de los parapléjicos, está boby de 10 años, quien ya no puede caminar por la edad y por los problemas renales que le aquejan. Le acompaña Ozuna, un perrito que sobrevivió a la enfermedad del moquillo, pero quedó con secuelas. El Albergue “CanRiño” está compuesto de seis áreas, levantadas en un terreno de 60 metros; de acuerdo al administrador del albergue, Germán Rodríguez, las colaboraciones se han reducido, debido a que “nos encontramos en temporada escolar”. En este sentido, instó a la ciudadanía a colaborar para que estos animalitos sigan con los cuidados que reciben en este centro. En cuanto a alimentos, se necesita arrocillo, carne, avena, fideo, harina y sal. Para los dormitorios se necesita casitas, colchones y cobijas. Asimismo, se requiere insumos de aseo como deja, fundas de basura, cloro, creso, escobas, recogedores, esponjas para lavar y más. También se necesita voluntarios para ayuda en limpieza, en su aseo y pasearles”, señaló.
