POLÍTICA
Donald Trump, expresidente de Estados Unidos, fue víctima de un intento de asesinato mientras daba un mitin en Butler, Pensilvania. En el ataque, que se produjo anoche, dos personas han fallecido, incluido el presunto autor. Trump fue rápidamente evacuado del lugar por el Servicio Secreto, que ha negado haber rechazado solicitudes de seguridad adicional.

El portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, declaró en un breve comunicado que los informes sobre la denegación de recursos de seguridad adicional para el mitin de Trump son falsos. “Añadimos recursos de protección, tecnología y capacidades debido al aumento del ritmo de los viajes de campaña”, aseguró Guglielmi.
La Santa Sede ha mostrado su preocupación por el ataque, destacando que “duele a las personas y a la democracia, provocando sufrimiento y muerte”. En un comunicado, el Vaticano se sumó a la oración de los obispos estadounidenses por América, las víctimas y la paz en el país, y pidió que las razones de los violentos no prevalezcan.

Antonio Peláez, periodista que estaba grabando un documental en el lugar del mitin, relató que escuchó los disparos, pero inicialmente no les dio importancia hasta que vio a gente salir del recinto. Su testimonio ofrece una visión directa del caos vivido durante el ataque.
El periodista Emilio Doménech de newtral.es informó que ya existe merchandising republicano con la imagen de Trump levantando el puño instantes después del intento de asesinato. “Las tiendas en ciudades como Nueva York ya están vendiendo camisetas con esta imagen”, indicó Doménech, y no descartó que Trump utilice esta imagen en su campaña.
Óscar Vara señaló en el programa Al Rojo Vivo que las probabilidades de que Trump gane las elecciones han aumentado tras el intento de asesinato. Según Kiko Llaneras, especialista en datos de El País, las probabilidades de elección de Trump han subido del 60% al 75%.
El corresponsal en Estados Unidos de laSexta describió la campaña como “agresiva”, en la que se plantea una elección entre la democracia y su fin. Destacó el ambiente tóxico en un país fuertemente armado, señalando la sorprendente facilidad con la que el atacante pudo acercarse a Trump.