SUCESOS
La tragedia golpeó a un grupo de estudiantes de un Instituto Tecnológico de Ibarra que realizaba una gira de observación en la localidad de Agoyán, Baños de Agua Santa. Lo que comenzó como una excursión educativa y turística, terminó en una angustiosa búsqueda luego de que dos jóvenes fueran arrastrados por la corriente del río Pastaza.

El sábado 27 de julio de 2024, los estudiantes decidieron aprovechar el día para conocer más sobre la belleza natural de la región, llegando hasta la comunidad de Río Verde, específicamente al famoso Pailón del Diablo. El grupo se dividió en dos; mientras algunos se quedaron fuera del complejo turístico, otros ingresaron para explorar la cascada y el sendero ‘La Playa’.
Fue en este sendero donde Paulina T., de 20 años, se sentó peligrosamente cerca de la orilla del río. Pese a las advertencias de sus compañeros sobre el peligro inminente, Paulina no se alejó. Momentos después, la fuerza del agua la arrastró río abajo. En un acto de valentía y desesperación, Sebastián M., de 22 años, se lanzó al agua para intentar rescatarla, pero también fue arrastrado por la potente corriente.
De inmediato, los compañeros de los estudiantes contactaron al servicio de emergencia ECU 911. Rápidamente, la Policía del cantón y el Cuerpo de Bomberos llegaron al lugar y empezaron la búsqueda a las 14:00 horas. Sin embargo, la caída de la tarde y las difíciles condiciones de visibilidad obligaron a suspender el operativo.
La búsqueda se reanudó la mañana del domingo 28 de julio, contando con el apoyo de los Cuerpos de Bomberos de Baños, Mera y Pastaza, así como de la Cruz Roja. La comunidad y los equipos de rescate mantienen la esperanza de encontrar a los jóvenes, mientras la tragedia subraya la importancia de acatar las medidas de seguridad en zonas naturales de riesgo.