ASCENSO
La cuarta fecha del cuadrangular de ascenso de Chimborazo, que se jugó este fin de semana pasado, dejó jerarquía, oficio y planificación, tres ingredientes que comienzan a separar a los candidatos de los que apenas resisten.

En Cajabamba, Daquilema FC consiguió una victoria frente a Sonorama Fútbol Club. El marcador de 0-2 reflejó la superioridad visitante y el peso de sus refuerzos extranjeros. Los paraguayos Roque Guachiré y Ariel Roa firmaron los goles que hoy mantienen a los interculturales en la cima de la tabla con 10 puntos, dos más que Centro Deportivo Olmedo.
El conjunto de Daquilema exhibió carácter y orden. Supo neutralizar a un Sonorama que no encuentra la brújula en el torneo y que, tras los malos resultados, prescindió de su director técnico, Héctor “Pipa” González. Su salida parece ser la consecuencia lógica de un proyecto que nunca despegó y que terminó hipotecando las aspiraciones del club.
La otra cara de la jornada se vivió en el estadio Olímpico Fernando Guerrero. Centro Deportivo Olmedo, con la obligación de ratificar su condición de protagonista, rescató un empate frente a Cisneros FC.
El gol del juvenil Ronaldo Landa evitó la derrota y devolvió algo de respiro, pero las sensaciones fueron de un equipo mezquino y aún con ideas en construcción Los jugadores llamados a marcar diferencias, como Wittle o Chicaiza, lucieron apagados y desconectados. El equipo no tuvo claridad en la generación de juego ni contundencia en ataque.
Con este empate, el “Ciclón” suma 8 puntos de los 12 disputados, una cifra que lo mantiene en la pelea, pero lo obliga a ganar sí o sí en las próximas fechas para no ver comprometida su planificación en la temporada 2025. Olmedo, con una plantilla reconocida y un pasado de gloria, parece estancado entre la presión de la hinchada y la falta de un rumbo futbolístico.