Liga Deportiva Universitaria volvió a mostrar las credenciales de ser el único club ecuatoriano con la “Gloria Eterna” en sus vitrinas. El conjunto dirigido por Tiago Nunes derrotó 2-0 a Botafogo, dio vuelta a la serie y clasificó a cuartos de final del certamen continental.

El Albo mostró jerarquía en una noche donde el fútbol se mostró desde un solo lado. El resultado de la ida fue1-0 a favor del campeón defensor, parecía un escollo difícil para LDU.
La historia se torció en Quito, donde los brasileños lucieron irreconocibles y Liga fue un equipo que jugó con convicción, presión alta, la intensidad en la marca y la claridad para atacar por las bandas, Liga sometió a un Botafogo que jamás encontró su lugar en el Rodrigo Paz.
El gol de Gabriel Villamil, con un derechazo cruzado igualó la serie, todo mostraba que el local estaba para mucho más. El mediocampista boliviano fue la figura, manejó los tiempos, recuperó balones y dio equilibrio en una zona donde Liga marcó diferencias abismales.
Con el marcador global empatado, la presión se trasladó al conjunto brasileño. Pero Botafogo no supo leer el partido, replegó líneas, renunció a la posesión y apostó al contragolpe. Esa pasividad terminó por hundirlo. Liga, con paciencia y empuje, buscó el segundo tanto y lo encontró en el complemento.
Una mano evidente de Marlon Freitas dentro del área fue sancionada sin discusión, y Lisandro Alzugaray se encargó de transformarla en gol desde los doce pasos. Sin embargo, la expulsión de Richard Mina puso un matiz de sufrimiento innecesario.
Una falta imprudente lo dejó fuera de la cancha y comprometió a los albos en el tramo final. Liga dejó la impresión de un equipo sólido y convencido, el riobambeño Gonzalo Valle apenas fue exigido.