Andrés Andrade, actual número 338 del ranking mundial, derrotó por 1-6, 6-3 y 6-2 a Andrej Nedic, sellando el triunfo de Ecuador sobre Bosnia & Herzegovina en la Copa Davis. La victoria permite al equipo tricolor avanzar a los Qualifiers de la Fase Final 2026, una instancia que ubica al país en la antesala de la élite del tenis mundial, lo ocurrido en el Club Rancho San Francisco tuvo un aire épico.

Andrade no comenzó bien, el primer set se le escapó de manera rápida y contundente, con un 1-6 que dejaba dudas. Pero en ese momento apareció la otra raqueta invisible de la serie; el público. El aliento constante de los aficionados devolvió la confianza al guayaquileño, que respondió con temple en el segundo parcial.
El quiebre en el sexto game para colocarse 4-2 fue el punto de quiebre en la moral de ambos jugadores. A partir de eso, Andrade no soltó más el control del partido. El tercer set fue una exhibición de carácter. El ecuatoriano se adelantó 5-0, dejando sin respuestas a Nedic, que parecía no encontrar las emociones ante la altura de Quito y la presión.
El 6-2 final llegó con un grito de desahogo, era la confirmación de que Ecuador, pese a la diferencia de rankings y presupuestos, puede imponerse en los grandes escenarios de la Copa Davis. En la planilla oficial, el equipo tricolor estuvo compuesto por Álvaro Guillén (243 ATP), Diego Hidalgo (78 en dobles), Gonzalo Escobar (98 en dobles), Felipe Rivadeneira (486 ITF junior) y el propio Andrade.
Sin embargo, habría que anotar a otro jugador que no aparece en el acta, la hinchada. El respaldo del público en Quito fue determinante en los momentos de mayor tensión, cuando cada punto se gritaba como si fuese un match point. Hubo roces y protestas entre capitanes.
Raúl Viver, líder del equipo ecuatoriano, discutió con el técnico rival Zoran Zrnic. Este condimento extra le dio al triunfo un sabor especial, se ganó dentro y fuera de la cancha.