EVENTO
En el Festival de Muralismo celebrado el sábado 17 de agosto en la Concha Acústica del Malecón Boayaku Puyu, cinco destacados artistas plásticos de la localidad lograron plasmar, con su talento y creatividad, la esencia de los pueblos autóctonos de Pastaza. Este evento fue una de las principales actividades organizadas en el marco de las festividades de “Agosto, mes del Turismo y la Cultura”, y congregó a un nutrido grupo de turistas y visitantes que quedaron maravillados ante las obras.
Iván Espín fue uno de los artistas más destacados del festival, capturando en su mural la esencia de los juegos ancestrales que forman parte del legado cultural de Pastaza. Su obra evocó la nostalgia y el respeto por las tradiciones que aún se mantienen vivas en la memoria colectiva de la comunidad. Por su parte, Paul Toledo aportó una perspectiva única al representar al Kamari Ista, una figura clave en la cosmovisión local, logrando transmitir la importancia espiritual y cultural de esta entidad para los pueblos de la región.
Pablo Figueroa, otro de los participantes, centró su obra en la elaboración de artesanías, un arte que ha sido transmitido de generación en generación y que sigue siendo un pilar en la identidad de Pastaza. A través de su mural, Figueroa logró resaltar la maestría y la dedicación con la que los artesanos de la región crean piezas que no solo son objetos de uso cotidiano, sino también expresiones artísticas que cuentan historias y preservan el conocimiento ancestral.
María Eugenia Pedraza, en cambio, eligió enfocarse en la elaboración ancestral de la chicha, una bebida tradicional que forma parte integral de las festividades y rituales de la comunidad. Su obra no solo resaltó el proceso de elaboración de la chicha, sino también su significado en la vida social y cultural de los pueblos autóctonos.
Finalmente, Danilo Bonilla representó en su mural el viaje espiritual del shamanismo, una práctica ancestral que sigue siendo fundamental en la vida de muchas comunidades de Pastaza. Su obra capturó la profundidad y la mística de esta tradición, invitando a los espectadores a reflexionar sobre la conexión entre el hombre y la naturaleza, y sobre la importancia de preservar estas prácticas para las futuras generaciones.
El público asistente aplaudió las creaciones artísticas y pidió que continúen estos programas.
