TUNGURAHUA
La madrugada del 10 de septiembre, un joven de nacionalidad colombiana, de apenas 23 años, fue asesinado a tiros en el Paso Lateral Sur de Ambato, el crimen, que según las primeras hipótesis estaría relacionado con un presunto ajuste de cuentas, ha encendido las alarmas entre las autoridades y los habitantes de la zona, quienes temen un incremento de la violencia ligada al crimen organizado.
De acuerdo con información preliminar proporcionada por la Policía Nacional, el hecho ocurrió alrededor de las 03h00, cuando la víctima caminaba sola por uno de los costados de la vía, aproximadamente a 200 metros de un conocido motel del sector. En ese momento, dos individuos a bordo de una motocicleta de color negro se acercaron al joven.
Sin mediar palabra, uno de los ocupantes del vehículo sacó un arma de fuego y disparó en repetidas ocasiones contra él. Testigos afirman haber escuchado al menos cinco detonaciones. Una mujer que transitaba en su vehículo por el lugar fue testigo directa del ataque. De inmediato, se comunicó con el sistema de emergencias ECU 911, lo que permitió la rápida movilización de personal policial y de socorro.
Al llegar al sitio, agentes de la Policía Nacional constataron que el joven ya no tenía signos vitales. Su cuerpo yacía tendido sobre la calzada, con múltiples heridas de bala. Según el parte policial preliminar, la víctima presentaba al menos cinco impactos de proyectil en zonas sensibles: cuello, rostro, cabeza y mano izquierda, lo que evidencia la intención directa de acabar con su vida.
Agentes de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased), así como personal de Criminalística, se hicieron presentes en el sitio para realizar el respectivo levantamiento del cadáver y las pericias correspondientes, el cuerpo fue trasladado en la ambulancia de Medicina Legal hasta el Centro de Investigaciones Forenses de Ambato.
Allí, su madre logró reconocerlo gracias a varios tatuajes característicos que portaba en brazos y torso. Fuentes cercanas a la investigación indicaron que este hecho violento estaría vinculado a disputas entre grupos de delincuencia organizada que operan en la provincia de Tungurahua.
