ECONOMÍA
Ecuador, líder mundial en la exportación de banano, continúa afianzando su presencia en los mercados internacionales. Datos del Banco Central revelan que, entre enero y abril de este año, el país envió al exterior 139,7 millones de cajas (de 18,14 kg cada una) de banano, cifra que representa un alza del 7 % en volumen y del 12 % en valor, alcanzando un monto de 1 515 millones de dólares.

Este desempeño cobra aún más relevancia si se considera el complejo escenario global: conflictos armados en distintos continentes, fenómenos climáticos adversos y el endurecimiento de los controles de calidad exigidos por la Unión Europea, principal comprador del fruto ecuatoriano.
“Ante estos retos estructurales y coyunturales, es imprescindible articular acciones inmediatas”, advirtió José Antonio Hidalgo, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (AEBE), durante la clausura de la convención Banana Time Machala 2025.
Principales destinos y variaciones
-Unión Europea (31,4 %): Recibió 43,8 millones de cajas, un incremento del 4,4 %.
-Rusia (20,4 %): Con 28,51 millones de cajas exportadas, creció un notable 11,6 % tras la reactivación de la demanda después de la crisis comercial de 2022.
-Medio Oriente (13,4 %): Compró 18,73 millones de cajas, 4,5 % más, a pesar de la inestabilidad en la región.
-Estados Unidos (11,7 %): Importó 16,29 millones de cajas, un alza del 8,8 % a pesar de los aranceles del 10 % vigentes desde 2018.
En Machala, capital bananera de El Oro —que aporta el 18 % de la superficie cultivada del país—, los empresarios analizaron también el impacto de las intensas lluvias e inundaciones registradas a inicios de año, las cuales han dificultado el cumplimiento de los volúmenes comprometidos. A ello se suman las amenazas fitosanitarias: la expansión del hongo moko y el fusarium raza 4, plagas que ya han causado estragos en Colombia, Perú y Filipinas.
Frente a estos desafíos, la AEBE insiste en fortalecer las medidas de prevención en campo, diversificar destinos y mejorar constantemente los procesos de empaque y certificación. “El actual contexto comercial entre Estados Unidos y China resalta la necesidad de mantener un diálogo abierto y cooperación con todos nuestros mercados estratégicos”, concluyó Hidalgo.