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sábado, octubre 12, 2024

Barrio Rosa María se siente agredido

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“Este fin de semana, con dedicatoria hemos sido agredidos por todo lado con saña y alevosía, (manchado de paredes, puertas, ventanas ver fotografías), parece alguna dedicatoria especial, para quienes el error más grande que hemos cometido, VIVIR con dignidad, a través de buenas prácticas ciudadanas, desarrollando durante 3 años, día a día y cada vez más convencidos que sí es posible Vivir Mejor en Riobamba “

Es el  testimonio dramático, doliente del presidente  del Barrio Rosa María que,  en relación al problemas de los grafitis, propagandas en los postes y paredes, siente el abandono y  desprotección   por lo que invoca  la “participación de las nuevas autoridades, que llegan con muchas expectativas ciudadanas, a que empiecen hacer el trabajo que les corresponde de forma eficiente, honesta e inmediata, y recuerda a los “Señores concejales, Ing. Marco Portalanza, Arq. Jaime López, Dr. Patricio Guaranga, Ing. Marco Sinaluisa, Ing. Martha Sinbaña, Ing. Nathalia Urgiléz, Lic. Patricio Corral, Abg. Luis Carvajal, Dr. Jorge Morocho, Dra. Rocio Pumagualli, Dr. Silvio Alvarez y a todos los Directores de cada Departamento del GADM Riobamba” que “no se hace una ciudad diferente con autoridades y ciudadanía indiferentes”

La I. Municipalidad  aprobó ya la ordenanza que busca controlar y sancionar a quienes  manchan los espacios, inmuebles públicos y privados de la ciudad. Esta ordenanza  puede convertirse en  letra muerta si paralelamente no se implementa un control y acciones coordinadas para proteger a la urbe de estos actos vandálicos.                                         17

Los graffitis,  cuya historia viene desde antes de Cristo,  como  expresión de arte urbano, son  generalmente agresivos y de protesta; son siempre realizados por jóvenes opuestos a la visión conservadora e institucionalizada de los adultos; unos contienen  formulaciones políticas, otros son simples frases escritas con matices de violencia y protesta; unos son graciosos  y llenos de fina ironía y, algunos por excepción, verdaderas obras de arte. Pero, no faltan también los manchones grotescos y vulgares como los vandálicos  impregnados en el limpio barrio Barrio Rosa María

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