Cada 22 de marzo, el mundo conmemora el Día Mundial del Agua, una fecha que nos invita a reflexionar sobre la importancia de su conservación y a impulsar acciones concretas para garantizar su disponibilidad para las futuras generaciones.

El acceso al agua sigue siendo un desafío global. Según la ONU, una de cada cuatro personas en el mundo carece de acceso a agua potable segura, y se estima que para 2050, más del 50% de la población vivirá en zonas con estrés hídrico. Ante esta realidad, es fundamental que empresas, gobiernos y ciudadanos adopten prácticas responsables que reduzcan el desperdicio y protejan las fuentes de agua.
Como parte de su compromiso con la sostenibilidad, Nestlé Ecuador impulsa iniciativas para el uso eficiente del agua en todas sus operaciones en fábricas Sur y Guayaquil. A través de diversas iniciativas, la compañía optimiza el uso del agua, promueve su reutilización y refuerza su liderazgo en sostenibilidad hídrica.
En la Fábrica Sur, Nestlé opera una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales con una capacidad de 8 m³ diarios. Esta infraestructura cumple con estrictos estándares ambientales, asegurando que el agua utilizada en los procesos productivos sea tratada antes de su reintegración al ecosistema.
Por su parte, en la Fábrica de Guayaquil, la compañía ha invertido en tecnología de punta para mejorar el tratamiento de aguas residuales que tiene una capacidad de 50 m³ diarios, que permite optimizar los procesos de descarga de efluentes y garantizar el cumplimiento de los parámetros ambientales. exigidos para el sistema de alcantarillado sanitario en el país.
Con el objetivo de reducir el consumo de agua y mejorar la eficiencia operativa, la compañía ha implementado diversas iniciativas, entre ellas:
•Concientización sobre el uso del agua, promovida a través del programa Tricolor SHE, donde el color azul en forma de gota resalta la importancia de cuidar el recurso hídrico.
•Optimización del consumo en lavamanos, mediante el cambio de boquillas en las nuevas áreas de las fábricas para reducir el desperdicio de agua.
•Consumo estándar estable durante tres años consecutivos, sin incrementos en el uso del recurso, reflejando el impacto positivo de sus estrategias de eficiencia hídrica. A través de comités de agua, se ha buscado la reducción y eficiencia en los procesos y productos sin comprometer la inocuidad alimentaria.