SENTENCIA
Centro Deportivo Olmedo vuelve a enfrentar momentos amargos, esta vez por la situación judicial de su expresidente Jaime Tamayo, cuyo accionar ha repercutido en la vida del club. De acuerdo con un comunicado oficial del directorio, Tamayo mantiene una sentencia condenatoria ejecutoriada de seis meses de privación de libertad, vigente desde el pasado 5 de agosto.
La resolución judicial, aunque corresponde a un conflicto personal, tiene impacto en el club. La Ley del Deporte, Educación Física y Recreación establece que los dirigentes con sentencias penales pierden automáticamente sus derechos de representación.
El caso es delicado porque Tamayo se encuentra prófugo de la justicia, lo que deja al Olmedo en un escenario complejo frente a los organismos reguladores y a la opinión pública. Ante este vacío de poder, se desarrolló un proceso electoral en el que fue elegido como nuevo presidente Luis Peñafiel, representante de la empresa “I.P.”, para el período 2025-2029.
En la misma jornada se designó a Xavier Álvarez como vicepresidente. Peñafiel, cercano a la dirigencia de Tamayo y partícipe en decisiones de la temporada 2025, asume el reto de encabezar una gestión para proyectar estabilidad y encaminar al club en medio de la crisis.
El siguiente paso será registrar al nuevo directorio ante el Ministerio del Deporte y la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), un trámite que se espera completar en los próximos días. Las consecuencias del accionar personal de Jaime Tamayo, tienen el matiz del momento incomodo que el equipo de fútbol vive y expuso en la última recta del campeonato provincial de segunda categoría.
Se espera conocer detalles de cómo reforzará la plantilla el equipo encabezado por Peñafiel, tomando en cuenta que se perdió el primer objetivo del año, ahora resta el más importante, ascender.
