La fecha 28, programada tras la doble jornada de Eliminatorias Sudamericanas, concentra todas las expectativas en el Clásico del Astillero entre Emelec y Barcelona, duelo que podría condicionar las aspiraciones de ambos en este cierre de la Fase Inicial.
El cronograma oficial de la jornada había sido publicado con antelación, sin embargo, la organización realizó un ajuste de última hora.
El partido entre El Nacional y Macará, previsto para las 12h00 del domingo 14 de septiembre, se adelanta 15 minutos y arrancará a las 11h45. Un cambio mínimo en apariencia, pero que confirma una constante en el torneo, la falta de firmeza en la planificación, con modificaciones que, aunque leves, afectan a clubes, hinchas y transmisiones.
El resto de los compromisos mantendrá sus horarios iniciales. La LigaPro insiste en dar señales de orden, pero los ajustes, por más pequeños que parezcan, dejan la sensación de improvisación en una competencia que se encuentra en plena recta final.
El duelo entre Emelec y Barcelona, fijado para el domingo 14 de septiembre a las 17h30 en el Estadio George Capwell, trasciende lo meramente deportivo.
Se trata del segundo enfrentamiento del año entre los dos equipos más importantes de la costa ecuatoriana, un partido que inevitablemente arrastra polémica y un componente emocional que suele superar cualquier lectura táctica.
Emelec, con la urgencia de mejorar su irregular campaña, necesita un triunfo que lo mantenga con opciones de meterse en torneos internacionales. Barcelona, en cambio, carga con la presión de no perder terreno en la pelea por los primeros puestos, aunque su andar reciente no da bríos de mejorar.
