CIUDAD
Los trabajos en la avenida Carlos Zambrano, provocaron un enfrentamiento institucional que puso frente a frente al Municipio de Riobamba y la Federación Deportiva de Chimborazo (FDCh).

Los trabajos viales, parte de un proyecto de modernización urbana, provocó cuestionamientos por parte de la entidad deportiva, que interpuso una acción legal al considerar que parte de su infraestructura se veía comprometida y, con ello, se vulneraba el derecho al deporte.
El conflicto radicaba en la titularidad de los predios, la FDCh aseguraba que los espacios a intervenir formaban parte de la infraestructura federativa, el alcalde John Vinueza sostuvo públicamente que se trataba de bienes municipales.
La pugna derivó en una solicitud de medidas cautelares por parte de la Federación, con el objetivo de detener las obras hasta que se aclarara la situación. Sin embargo, durante la audiencia respectiva, el Municipio presentó documentación que acreditó la propiedad municipal de los espacios en disputa. Esto llevó a la autoridad competente a desestimar las medidas cautelares, con el argumento de que no se probó una afectación real al derecho al deporte.
Edison Rosero, síndico del Municipio, fue el vocero en la rueda de prensa de este 17 de septiembre. Explicó que la resolución judicial es de aplicación inmediata y ratificó que los trabajos cuentan con sustento legal y técnico. “El Municipio ha demostrado la titularidad de los predios y, en consecuencia, las medidas cautelares han sido negadas. La obra avanza dentro de la legalidad”, señaló.
Desde la alcaldía se asumieron compromisos que garantizan la preservación del muro de escalada y del gimnasio de halterofilia.
El compromiso municipal de no afectar infraestructuras específicas puede ser un alivio, pero la falta de claridad en la delimitación de competencias seguirá siendo un punto de fricción si no se establecen políticas conjuntas.