Los monaguillos se concentraron en la Catedral y luego participaron en varias actividades en Santa Cruz.
Ayer en la Casa de Santa Cruz de la Diócesis de Riobamba, se desarrolló el encuentro de monaguillos, asistieron más de 200 niños y jóvenes de las diferentes parroquias eclesiásticas de la Diócesis.
El padre Carlos Álvarez, coordinador del departamento de Liturgia y director del Seminario Mayor, estuvo dirigiendo el evento en representación del Obispo de Riobamba.
Acudieron monaguillos representantes de las unidades educativos y especialmente aspirantes a monaguillos de las diferentes parroquias, comprendidos entre los 5 a 18 años.
Explicó el sacerdote, que ser monaguillo es el servicio al altar, no necesariamente serán sacerdotes, pero si se sabe que tiene vocación, se le invita a las diferentes actividades para que cumpla con su espíritu de mayor servicio a Dios y a la Iglesia.
Este evento que se desarrolló ayer, es el quinto encuentro y se cumple en Santa Cruz porque hay el espacio para que los niños y adolescentes cumplan varias actividades de socialización, de aprendizaje y sobre todo para compartir.
Estuvieron como facilitadores los subcoordinadores, monitores y voluntarios, son cien personas que se encargaron de esta actividad, sobre todo de apoyo, incluyen padres de familia, catequistas, un sacerdote franciscano, religiosas y diferentes grupos de las parroquias de Riobamba.
El monaguillo ayuda al sacerdote en las eucaristías, pero en la casa y en la escuela hace el vínculo entre la iglesia y la sociedad, debe ser alegre, solidario y que ayude al más necesitado, es una persona que da testimonio de su fe. (09)
