INVESTIGACIÓN
Investigadores de la Universidad San Francisco de Quito, Comité Ecuatoriano de Registros Ornitológicos, Reserva de Producción de Fauna Chimborazo, Instituto Nacional de Biodiversidad (INABIO) y Biotransecto confirman la existencia de al menos una localidad de contacto entre O. c. Chimborazo y O. c. Jamesonii, dos subespecies del colibrí Oreotrochilus Chimborazo.
El Oreotrochilus Chimborazo se distribuye a lo largo de los páramos andinos (pastizal de tierras altas), desde el volcán Chiles, en el extremo sur de Colombia, a lo largo de ambas cordilleras andinas en Ecuador, al sur hasta Azuay en el macizo del Cajas, en un rango de elevación de 3600–4600 m. Tiene dos subespecies distintivas: O. c. Chimborazo, de los páramos alrededor del volcán Chimborazo (o meseta del Chimborazo), en el centro-oeste de Ecuador, y O. c. Jamesonii, distribuida en otras partes del rango de esta especie.
Ambas subespecies difieren en el color de la gorguera en los machos; O. c. Jamesonii tiene una gorguera morada (como toda la cabeza), mientras que O. c. Chimborazo tiene una gorguera morada con un parche central verde azulado en forma de medialuna. En ambas subespecies, el sexo de los juveniles es distinguible antes de que abandonen el nido. Aun así, la identificación subespecífica en estos plumajes no es posible a menos que algunas plumas verdes comiencen a emerger en los machos juveniles.
Un análisis genético poblacional reciente de loci microsatelitales encontró que algunos individuos de O. c. Jamesonii de localidades al norte y sur de la meseta de Chimborazo muestran mezcla genética con O. c. Chimborazo. Además, dos de 22 individuos de O. c. Chimborazo mostraron contribuciones genéticas importantes de O. c. Jamesonii. Este hallazgo de individuos genéticamente mezclados al norte del volcán Chimborazo era esperado porque fueron recolectados en Apagua, cerca del volcán Quilotoa, de donde provienen especímenes híbridos entre ambas subespecies que antes se consideraban como una tercera subespecie, O. c. Soderstromi.
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En este sentido, este estudio, desarrollado por los investigadores Juan Freile, Paúl Tito (Asociado al INABIO), José María Loaiza-Bosmediano y Elisa Bonaccorso, sugiere que la zona de contacto entre estas subespecies abarca una franja de norte a sur de aproximadamente 130 km a lo largo de los Andes occidentales de Ecuador, tras el descubrimiento de una nueva localidad donde ambas subespecies coexisten. De esta manera, se confirma la coexistencia de ambas subespecies de la estrella ecuatoriana en al menos una localidad al sur del volcán Chimborazo. El uso de datos genéticos de alta resolución permitirá dilucidar en el futuro si esta coexistencia implica flujo genético contemporáneo.
La investigación está disponible en The Wilson Journal of Ornitology: https://bioone.org/journals/the-wilson-journal-of-ornithology/volume-136/issue-2/23-00041/Exploring-the-contact-zones-between-Ecuadorian-Hillstar-Oreotrochilus-chimborazo-subspecies/10.1676/23-00041.short