Por: Antonio Velásquez
En un artículo anterior titulado ” Anécdotas dignas de ser contadas”, mencionamos que en una buena parte el triunfo del Presidente Daniel Noboa se debió al voto decidido de los jubilados y ancianos que se volcaron a las urnas al ver en peligro el destino del país, recordando en especial, el voto de un anciano de 106 años en Ibarra.
Hechos y realidades que el actual gobierno no debe olvidar, y en una muestra de gratitud y reconocimiento, debería de alguna manera compensarlos, hablemos por ejemplo : 1) Del aumento de la pensión jubilar a mínimo un salario básico, muchos jubilados trabajaron y en la mayor parte de los años cuando la moneda oficial era el sucre, es decir sus aportes fueron en sucres, que al cambio en dólares , les ha representado una pensión jubilar irrisoria, que no les alcanza ni para la tercera parte del costo de la canasta básica actual cifrada en $ 850 dólares . 2) El proveer de las suficientes medicinas para los hospitales públicos y del seguro social. muchos ancianos por su edad tienen precarias condiciones de salud y otros, enfermedades catastróficas, por lo que la medicina es urgente y necesaria para paliar en algo sus afecciones y su dolor. Merecen una vida digna, y como parte integral de ella, una salud igualmente digna. 3.- Se hace necesario pensar en la construcción de hospitales públicos en las 3 principales ciudades del país sólo para personas de la tercera edad, donde también puedan haber consultas médicas con galenos geriatras; la red hospitalaria publica y del IESS actual, no se da abasto para las citas médicas y hospitalización emergente o cirugías programadas.
¡Señor Presidente! Señores del gobierno, es hora de extender la mano y dar la ayuda necesaria hacia un sector de la población que dio sus mejores años para el desarrollo del país, y que desea que el mismo siga por el camino del orden, la justicia y la prosperidad.
En relación a todo lo manifestado anteriormente, y deteniéndonos un momento en uno de los significados de gratitud: como el reconocimiento a una buena obra recibida de una o más personas , cabe también, resaltando dicho significado, tener presente una frase valiosa de Cicerón : “La gratitud no sólo es la más grande de las virtudes , sino la madre de todas las demás”.
