INTERNACIONAL
Union Saint-Gilloise escribió un capítulo imborrable en la historia reciente del fútbol belga al proclamarse campeón de la Jupiler Pro League 2024-2025. Y en ese logro colectivo, el nombre del ecuatoriano Kevin Rodríguez quedó como uno de los símbolos de la resistencia, la fe y la renovación que vivió este modesto pero orgulloso club de Bruselas.

El Union Saint-Gilloise no solo conquistó el campeonato nacional después de una temporada brillante. También venció a sus propios fantasmas. Porque durante las últimas campañas, el club había coqueteado con la gloria sin poder concretarla, convirtiéndose en una especie de mártir romántico del balompié belga.
Esta vez, sin embargo, la historia fue distinta: los unionistas llegaron como líderes a la última fecha y supieron sostener su ventaja con carácter, fútbol y temple. Kevin Rodríguez, que llegó a Bélgica tras su paso por Independiente del Valle y una destacada actuación con la selección ecuatoriana, fue parte esencial de este recorrido.
Si bien no fue titular durante toda la campaña, su aporte ofensivo, su despliegue físico y su compromiso táctico sirvieron para consolidar la propuesta de un equipo que prioriza la intensidad, la transición rápida y la presión organizada. Para el delantero esmeraldeño, este título representa su primer gran logro en el fútbol europeo y su carrera está en pleno ascenso, esas son buenas noticias para Sebastián Beccacece de cara a la jornada de Eliminatorias.