El Club Sport Emelec atraviesa uno de los momentos más críticos de su historia. A la crisis deportiva que lo tiene peleando en los últimos lugares de la LigaPro, se suma una grave situación institucional que pone en peligro su estabilidad.

Las deudas acumuladas, las sanciones impuestas por la FIFA y la incertidumbre sobre su dirigencia han generado un panorama alarmante para el cuadro eléctrico. José Pileggi, presidente hasta hace poco, renunció ante la imposibilidad de solucionar los problemas financieros y administrativos del club.
Esto llevó a la realización de elecciones anticipadas, en las que Jorge Guzmán resultó ganador, pero su inscripción como nuevo presidente aún está en revisión por parte del Ministerio del Deporte. El ministro José David Giménez indicó que el proceso está en análisis y que, aunque la ley permite hasta 30 días para emitir una resolución, se busca una respuesta rápida debido a la gravedad del caso.
Mientras tanto, Emelec sigue sin poder inscribir jugadores, agravando aún más su crisis deportiva. Guzmán fue contundente sobre la situación del club: “Emelec está casi todo destruido. Hoy es el club más moroso de la Conmebol. Tenemos siete sanciones. El club corre el grave peligro de bajar a la Segunda Categoría.
Esto no es un juego, los emelecistas deben saber que quienes están haciendo esto están conspirando con la vida institucional del club”. Además, reveló que los ingresos generados por la Explosión Azul, el evento de presentación del equipo, desaparecieron. “La Explosión Azul puede haber sido una ‘desviación’ Azul.
No hay el dinero de este evento”, expresó, dejando entrever irregularidades financieras. El presidente electo de Emelec también apuntó contra José Auad, empresario y excandidato en las elecciones, a quien responsabiliza, junto a otros opositores, de la incertidumbre que vive el club.