CIUDAD
El anuncio de trabajos en la cubierta del mercado Pedro Lizarzaburu, uno de los espacios más tradicionales de Riobamba, fue socializado este 15 de julio, en medio de cuestionamientos. Si bien se valora la intención de preservar un bien patrimonial, los usuarios del mercado reclaman soluciones sostenibles, tras años de promesas y obras inconclusas en el casco comercial de la ciudad.
Se realizó socialización para presentar el proyecto de intervención en la cubierta del edificio patrimonial. Autoridades municipales, técnicos y representantes de los comerciantes se reunieron para discutir detalles de la propuesta, que plantea trabajos de mantenimiento y rehabilitación en la parte de teja patrimonial y en la estructura de policarbonato que cubre parte del mercado.
El mercado, ubicado en una de las zonas más concurridas del centro histórico, ha sufrido durante años los efectos de la falta de mantenimiento, las filtraciones, y una infraestructura que, según los propios usuarios, no ha sido prioridad para ninguna administración.
Durante el acto, técnicos de la Dirección de Patrimonio explicaron que el 60% de las tejas patrimoniales serán reutilizadas como parte del enfoque de optimización de recursos. También se detalló que se respetará la estructura arquitectónica original, un punto clave considerando que se trata de un edificio con valor patrimonial.
Aunque hubo agradecimientos formales por parte de algunos representantes, como el dirigente Manuel Morocho, otros usuarios del mercado consultados por este medio señalaron que este tipo de socializaciones ya se han repetido en ocasiones anteriores, sin que las obras se ejecuten con la celeridad o profundidad prometida.
“Lo que necesitamos es que se cumpla con lo que dicen, porque el techo sigue filtrando agua en algunos puntos. Nos hablan de conservación, pero nosotros lo que pedimos es funcionalidad. El mercado está envejeciendo sin una intervención completa”, dijo una comerciante que pidió mantener su nombre en reserva.
