Artículo de opinión Por: Pablo Granja
De acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española (RAE), el idioma español está compuesto por unas 93.000 palabras, además de unas 70.000 consideradas obsoletas o en desuso y las provenientes de diferentes ámbitos, como neologismos, tecnicismos, extranjerismos, jerga y regionalismos. Miguel de Cervantes utilizó unas 20.000 palabras diferentes en su novela Don Quijote de la Mancha, la más leída en el mundo, disputándole el segundo lugar en publicaciones al “Libro Rojo” de Mao, ya que el primer lugar lo ocupa la Biblia.
La RAE se encarga de actualizar tanto el idioma como las acepciones de los vocablos a través del Diccionario. De uno de ellos, el “carajo”, cuyo significado más hosco se refiere al “miembro viril”, la RAE sostiene que su origen es incierto; yo creía que era la unión de dos palabras: cara y ajo, pero no ha sido así. También se usa para expresar enojo, escepticismo o sorpresa, como cuando uno está duchándose con agua templada y alguien abre otra llave y cae un chorro de agua fría, que hace inevitable lanzar un “¡achachay carajo!”. O cuando el marido, en un acceso de amor sincero, llega a la casa con un ramo de flores y la esposa reacciona con un “¿Y ahora, qué carajo hiciste?”. O gracioso como cuando una señora, tomando el té con unos amigos, no se percata de que está demasiado caliente y se le escapa un espontáneo: “¡Ay carajo, me quemé!”.
- EDITORIAL: Catarsis individual y colectiva
Sin llegar a ser una “mala palabra” ni soez sino dura, también es utilizada para transmitir desprecio o indignación. La RAE da algunos ejemplos que vamos a adaptar a las actuales circunstancias, para hacer preguntas y afirmaciones: ¿Cómo carajos logró el chavismo–madurismo que la producción petrolera se desplome de 3.1 millones de barriles de crudo diarios en 1999, a los 900.000 actuales? ¿Qué carajos hicieron para pasar de exportadores a importadores de nafta, tener escasez de gasolinas para el consumo interno, y pasar largas temporadas de apagones por falta de combustibles para las plantas de generación eléctrica como ocurrió en 2019? ¿Por qué carajos Venezuela vive una crisis económica teniendo una inimaginable riqueza en recursos naturales? Tienen: las reservas de crudo más grandes del mundo; la segunda de gas; la más grande de oro; las de thorium, mineral 200 veces más potente que el plutonio y el uranio, y que en valor supera al del oro; la cantidad de diamantes se calcula en 300.000 millones de quilates; además de grandes reservas de hierro, cobre y plata. ¿Cuándo carajos utilizarán esta riqueza para aliviar el sufrimiento del pueblo, en lugar de engrosar las cuentas que mantiene la cúpula corrupta en países cómplices? ¡En lo único en lo que han sido eficientes es en la sistemática persecución para mandar al carajo a la empresa privada, y así convertir a la gente en dependiente del gobierno! ¿Qué carajo tienen en lugar de corazón para no conmoverse al ver a la gente rebuscando qué comer en la basura, mientras uno de los gobernantes se gasta 16 millones de dólares en la boda de su hija? ¿Qué carajo sienten al ver que más de 7 millones de mujeres con sus hijos en las espaldas, junto a jóvenes frustrados y adultos agobiados, caminan casi arrastrándose con rumbo a buscar cierta esperanza porque en su país hasta eso les han robado? ¿Cuándo carajos dejarán de mentir para justificar sus fraudes, incluido el de las últimas elecciones? Maduro acaba de declarar que los jóvenes apresados por protestar recibirán adoctrinamiento para ser “reeducados”, ¿cuándo carajo se recluye él en un colegio para empezar a educarse? ¿Cuándo carajo dejará de oprimir y torturar al pueblo que lo detesta? ¿Cuándo desaparecerá este carajo, cara de ajo?
