En un país donde las historias de superación suelen escribirse entre montañas, dos jóvenes atletas comienzan a trazar su propia leyenda.
Noam y Pema Franchi, conocidos ya en el circuito nacional como “los hermanos maravilla” del trail running, están transformando su pasión por correr en la montaña en un camino hacia la élite mundial.
Lo asombroso no es el corto tiempo que llevan practicando este exigente deporte: apenas un año y medio. Él, de raíces franco-brasileñas; ella, ecuatoriana. Ocho años los separan, pero en la pista, esa diferencia se diluye.
Entrenan juntos, compiten juntos y hasta eligen las rutas y competencias en las que participarán de forma conjunta. Su vínculo es tan estrecho como su ambición es alta. Ambos provienen de un entorno deportivo.
Sus padres fueron nadadores, ellos también comenzaron su formación en el agua. Pero en septiembre de 2023, el rumbo cambió por completo. Fue en una competencia en Biblián, en la provincia de Cañar, donde se alinearon por primera vez en una carrera de montaña.
Contra todo pronóstico y con escasa experiencia, cruzaron la meta como ganadores en sus respectivas categorías. Desde entonces, los podios se han vuelto una constante. Lo suyo no ha sido una aparición fugaz, sino el inicio de un proceso que no ha hecho más que acelerarse.
En El Altar, una de las rutas más duras del país, ambos quedaron en segundo lugar. Pero el gran salto llegaría en 2024, durante la exigente Petz Trail Plus.
Con seis meses de preparación específica, Pema se llevó el primer lugar en el kilómetro vertical rompiendo el récord y también ganó los 10 kilómetros. Noam, por su parte, se ubicó cuarto en el vertical y se coronó campeón en la prueba de 20 kilómetros.
Dejaron atrás las piscinas y abrazaron las sendas escarpadas del trail running. “Nos dimos cuenta de que esto nos apasiona mucho más. El contacto con la naturaleza, el esfuerzo constante, la sensación de libertad en cada subida. Es diferente a todo”, cuenta Pema.
