Este Día de la Madre, celebramos a las mujeres que construyen futuro entre el trabajo y el hogar. Ser madre y ser profesional no son caminos separados. Para millones de mujeres en el mundo, son senderos que recorren simultáneamente, con pasión, sacrificio y amor.
En Latinoamérica, un estudio de ONU Mujeres revela que el 65% de las mujeres trabajadoras enfrenta diariamente el desafío de equilibrar sus responsabilidades profesionales con las del hogar.
Sin embargo, conciliar la vida laboral y familiar no es sencillo pues, de acuerdo con el informe “Panorama Laboral 2024” de la OIT, el acceso a políticas de apoyo como licencias flexibles, teletrabajo o servicios de cuidado infantil sigue siendo limitado en muchos países, lo que multiplica los retos para las madres trabajadoras.
No obstante, más allá de las estadísticas, cada historia individual brilla con luz propia, pues ser madre no es un obstáculo para crecer profesionalmente, sino una fuente inagotable de fuerza y motivación.
Tal como lo menciona Carolina Escalante, miembro del personal administrativo de la UISEK, para quién el manejo del tiempo suele ser uno de los principales retos al equilibrar ambos roles en su vida.
Asimismo, Grecia Vivas, docente del área de salud de la UISEK, explica que un gran reto es lidiar con la barrera cultural de muchos lugares de Latinoamérica donde “la madre sigue estando a cargo de la carga mental respecto a las actividades de los hijos y su crianza”.
Por otro lado, Johanna Medrano, docente de ingeniería de la UISEK, acota que los principales desafíos involucran la dedicación personal, las influencias familiares y el exceso de trabajo que se puede presentar en el área profesional.
A pesar de ello, estas madres dedicadas y profesionales exitosas han equilibrado ambas facetas a base de un esfuerzo constante. Por ello, nos comparten consejos y hábitos gracias a su experiencia.
Por un lado, Carolina aconseja mantener transparencia permanente y contar con el apoyo de personas clave en los dos espacios para trabajar en equipo tanto en el hogar como en su trabajo.
Además, Grecia recomienda adaptarse en mente y cuerpo para cada faceta, a fin de planificar y priorizar actividades para un mejor rendimiento.
Por último, Johanna propone delimitar cada actividad, resolver las tareas oportunamente durante la jornada laboral y no llevar el trabajo a casa, mientras que en el hogar recomienda priorizar a su familia desconectándose del trabajo.
Finalmente, todas nuestras madres comparten un mensaje, a aquellas profesionales que desea formar una familia o una madre quiere ejercer su profesión. “El camino puede que no sea sencillo, pero no se trata de suerte, sino de dedicación.” Nos demuestran que los límites no existen y que vivan a plenitud cada experiencia, pues potenciará muchas habilidades y enriquecerá sus vidas.
Por ello, en este día, rendimos homenaje a aquellas madres que dictan clases, que dirigen reuniones, que gestionan empresas y que, al mismo tiempo, siguen siendo el primer abrazo y el refugio seguro de sus hijos. Porque su amor, su esfuerzo y su ejemplo construyen un mundo más humano, más justo y lleno de esperanza.