Narváez tuvo dificultades en su competencia en los Juegos Olímpicos

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OLIMPIADAS.-    

Ecuador se levantó temprano, a casi 10 000 kilómetros de distancia, para seguir al atleta nacional en una competencia exigente. Sin embargo, la jornada no resultó como muchos esperaban para Narváez, quien finalizó en la posición 45°.

El competir solo, fue parte de las debilidades del Lagarto

La prueba de ruta, una de las más extenuantes del calendario olímpico, tuvo como vencedor al belga Remco Evenepoel. Con un tiempo final de 6:19:34 y una velocidad promedio de 43.154 km/h, Evenepoel demostró que es uno de los mejores ciclistas del mundo. El belga, ya había brillado en el Tour de Francia con su equipo Soudal Quick-Step, y ahora dominó la carrera desde el inicio.

En los últimos diez kilómetros, su desempeño fue espectacular, a pesar de enfrentar un contratiempo mecánico que le hizo cambiar de bicicleta y perder 10 segundos. Evenepoel, sucesor del ecuatoriano Richard Carapaz en esta prueba, agregó otra medalla de oro a su palmarés. Fue campeón del mundo en ruta en 2022, campeón del mundo en contrarreloj en 2023 y campeón olímpico en contrarreloj en 2024.

Con su victoria en la ruta de París 2024, consiguió un histórico póker en las grandes pruebas por selecciones a escala universal, convirtiéndose en el primer ciclista en ganar medallas de oro en contrarreloj y en ruta en los mismos Juegos Olímpicos. El podio fue completado por dos ciclistas franceses. Valentin Madouas se llevó la medalla de plata, mientras que Christophe Laporte obtuvo el bronce. Por su parte, Jhonatan Narváez sufrió un percance mecánico a 50 kilómetros de la meta, lo que lo relegó y le impidió alcanzar el diploma olímpico.

El ciclista tricolor, no logró recuperarse a tiempo, afectando su rendimiento en la fase final de la carrera. El recorrido, de 273 kilómetros, tuvo todo lo esperado; dureza y complejidad. Con un perfil clásico primaveral, 13 ascensiones breves que exigieron al a los ciclistas. La salida fue con el punto de partida bajo la icónica Torre Eiffel en París, un escenario que añadió un toque para el recuerdo.

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