Liga Deportiva Universitaria de Quito se impuso 3-2 sobre Técnico Universitario con un gol agónico del defensor haitiano Ricardo Adé, quien, a pesar de una visible molestia muscular, fue el inesperado salvador de los Albos en los minutos finales del encuentro.

La jornada sabatina de la LigaPro tuvo un inusual arranque matutino con este compromiso, que desde el primer minuto se alejó del libreto habitual. Técnico Universitario no esperó para incomodar y lo hizo con eficacia, a los 8 minutos, José Miguel Andrade silenció el estadio con un cabezazo tras un tiro de esquina, dejando expuesta una desconcentración temprana en la zaga alba.
Con ese golpe inicial, el Rodillo Rojo avisaba que no llegaba como víctima. Liga respondió con posesión, aunque con la misma intermitencia que ha caracterizado su juego en lo que va del año. Alzugaray apareció para igualar tras una buena asistencia de Michael Estrada, y poco después fue Alexander Alvarado quien capitalizó una jugada colectiva para remontar.
Parecía que la maquinaria alba se encendía. Antes del descanso, Andrade volvió a castigar una zaga dormida. Esta vez, un contragolpe le bastó a Técnico para vulnerar nuevamente el arco de Domínguez y sellar un 2-2 que desnudaba las debilidades defensivas de un equipo que no logra consolidar una identidad ni sostener ventajas con solvencia.
En el complemento, el partido se estancó. Técnico Universitario, con inteligencia táctica, blindó su área y esperó el desgaste físico de una Liga que, con la salida de Alvarado, perdió chispa y creatividad. La ausencia de claridad ofensiva obligó al técnico interino Patricio Hurtado a mover el banco, pero los ingresos no ofrecieron solucione, la U aún tenía una carta bajo la manga, el corazón de Ricardo Adé.
El zaguero central, que había mostrado signos de lesión durante el segundo tiempo, permaneció en cancha. Y fue precisamente él quien, en el minuto 93, conectó un cabezazo letal siendo el triunfo que necesitaban los albos.