APREHENDIDOS
La madrugada del 6 de junio, un operativo conjunto de la Fiscalía General del Estado y la Policía Nacional del Ecuador, dio un golpe certero a una organización criminal dedicada a la captación ilegal de dinero. En total, se ejecutaron 7 órdenes de detención en los cantones de Riobamba y Guano, en la provincia de Chimborazo, en el marco de una investigación por presuntos delitos financieros.

La operación, que involucró también 8 allanamientos, permitió la aprehensión de varias personas vinculadas a una red dedicada a la oferta de “inversiones” fraudulentas, donde aseguraban rendimientos mensuales de hasta un 200%.
Según las autoridades, los detenidos formaban parte de una estructura criminal que prometía a sus víctimas altos rendimientos a corto plazo mediante servicios de inversión en la bolsa de valores, trading en mercados y plataformas en línea, un esquema que ha sido reconocido como captación ilegal de dinero.
El monto involucrado en esta operación asciende a más de 2 millones de dólares, una cifra alarmante que refleja el nivel de organización de la estructura. Los estafadores se habrían aprovechado de la confianza de sus víctimas, quienes, atraídas por las promesas de grandes ganancias, entregaron grandes sumas de dinero para participar en las inversiones fraudulentas.
Durante los allanamientos realizados en los dos cantones, se incautaron varios indicios que refuerzan la investigación, entre los que se incluyen computadoras, terminales móviles y documentos. Estas pruebas serán fundamentales para la formulación de los cargos, que la Fiscalía tiene previsto presentar en las próximas horas.
El caso pone en evidencia un creciente problema de estafas y fraudes financieros en el país, un fenómeno que afecta a cada vez más personas en distintas regiones.
Las autoridades hacen un llamado a la población a ser cautelosa y a no dejarse seducir por ofertas de inversión que prometen altos rendimientos sin los debidos registros y regulaciones. Este golpe a la estructura criminal es un paso importante en la lucha contra el crimen organizado en Ecuador.
Según información preliminar, los miembros de la organización utilizaban técnicas de marketing agresivas para captar clientes, creando una falsa sensación de seguridad y confiabilidad. Se promocionaban como expertos en inversiones y hacían uso de plataformas tecnológicas que parecían legítimas, lo que facilitó la atracción de víctimas. Sin embargo, la realidad era muy diferente, y las grandes promesas de altos rendimientos se tradujeron en una estafa masiva.
A través de redes sociales y otros canales de comunicación, la estructura criminal logró expandir su alcance, atrayendo a personas que confiaron en la oferta.
Según el fiscal encargado del caso, esta red aprovechó el desconocimiento de las víctimas sobre el funcionamiento real de las inversiones en mercados financieros, para crear una falsa percepción de éxito económico, la fiscalía está analizando la información contenida en los dispositivos electrónicos incautados, con el fin de rastrear a otros miembros de la red que aún podrían estar operando.