CICLISMO
Tadej Pogacar, el ciclista esloveno del UAE Team Emirates XRG cumplió con los pronósticos que lo señalaban como el gran favorito y se llevó la victoria en la tradicional carrera italiana, firmando su tercer título en esta competencia.
Sin embargo, el triunfo no fue sencillo, una fuerte caída en la parte decisiva de la prueba puso a prueba su capacidad, los aficionados al ciclismo disfrutaron de una de las pruebas más esperadas de la temporada. Con un exigente recorrido de 213 kilómetros, incluyendo sus característicos tramos de sterrato, la carrera ofreció un gran espectáculo, el pelotón rodó a un ritmo elevado, con varios intentos de fuga que fueron neutralizados en el transcurso del recorrido.
Entre los favoritos se encontraban figuras como Thomas Pidcock, Tim Wellens y Ben Healy, además del propio Pogacar, quien, como en ediciones anteriores, partía con la responsabilidad de marcar diferencias, a 49 kilómetros de la meta, Pogacar sufrió una aparatosa caída al tomar mal una curva. El impacto dejó visibles heridas y raspones en su cuerpo, además de obligarlo a cambiar de bicicleta.
Por un momento, su continuidad en la competencia parecía en duda, pero el esloveno demostró por qué es uno de los ciclistas más completos del mundo: sin perder tiempo, se puso nuevamente en marcha y comenzó una impresionante remontada. Pogacar volvió a mostrar su agresividad en la carretera. A falta de 18 kilómetros para el final, lanzó un ataque demoledor que dejó sin respuesta a sus rivales.
Su capacidad para rodar en solitario y mantener un ritmo inalcanzable le permitió consolidar su ventaja y llegar en solitario a la icónica meta en la Piazza del Campo de Siena, registrando un tiempo de 5 horas, 13 minutos y 58 segundos. Al término de la competencia, Pogacar dijo: “Lo disfruté hasta el final, pero ahora que la adrenalina está bajando, empiezo a sentir el dolor de las heridas”, expresó el ciclista esloveno, quien sumó un nuevo título a su extenso palmarés.
