PLAGA.-
En el desarrollo de uno de los casos de corrupción más sonados de todos los tiempos Caso Plaga, el prefecto de Chimborazo, Hermel Tayupanda, ha sido mencionado en el testimonio anticipado de uno de los testigos protegidos, quien anteriormente fue su abogado defensor.
Este testimonio ha despertado incertidumbre en toda una provincia debido a la naturaleza de las revelaciones y los detalles proporcionados.
El exabogado del prefecto, identificado como M.I.H.S, compareció ante la justicia luego de entregarse voluntariamente y aceptar colaborar en calidad de testigo protegido. Durante la audiencia, realizada de manera pública a través de una plataforma de Zoom, medios de comunicación y la opinión pública pudieron seguir de cerca las declaraciones del testigo.
Caso de presunta violencia política: El testigo mencionó un incidente en el que el prefecto Tayupanda fue vinculado ante la Corte Nacional por un presunto caso de violencia política de género.
Si bien los detalles sobre este evento específico no fueron profundamente abordados en la audiencia, el hecho se refiere a la denuncia que en su momento presentó la viceprefecta Mónica Loza en contra de Tayupanda.
Reuniones y diálogos políticos: M.I.H.S también relató encuentros que sostuvo con miembros del equipo asesor del prefecto, uno de ellos en un restaurante prestigio en la ciudad de Quito. Estas reuniones estarían ligadas a discusiones políticas, aunque no se aclaró el contenido exacto de dichos diálogos, se mencionó los acuerdos para preparar una audiencia accidentada.
Entrega de dinero a un juez: Uno de los aspectos de mayor preocupación fue la afirmación de que se habría entregado la suma de 30.000 dólares a un juez de Quito, quien luego viajó a Riobamba para asistir a una audiencia.
El testigo protegido vinculó este pago al caso del prefecto, aunque no proporcionó detalles adicionales sobre el rol exacto del juez ni la naturaleza de la audiencia en cuestión, se conoció que el Juez no dio paso a la causal de destitución por “Violencia Política de Género” aplicando una sanción irrisoria.
