POLÍTICA
La viceprefecta de Pastaza, Lineth Calapucha, participó en la marcha de las nacionalidades indígenas que se desarrolló en rechazo a las recientes medidas adoptadas por el Gobierno de Daniel Noboa, entre ellas, la eliminación del subsidio al diésel, la consulta popular para convocar a una Asamblea Constituyente y la aprobación de leyes que, según los manifestantes, afectan al pueblo ecuatoriano.
La presencia de Calapucha en esta movilización marcó una clara diferencia política con el prefecto André Granda, quien ha manifestado su apoyo al Gobierno Nacional en el marco de la alianza política ADN–Semilla, la misma con la que resultó electa la asambleísta María Acuña, esposa del Prefecto.
De acuerdo con publicaciones difundidas en redes sociales, esta discrepancia habría tenido consecuencias internas para la Viceprefecta, a quien presuntamente se le retiró la secretaria y el chofer como medida de represalia. Aunque en las cuentas oficiales de Calapucha no existe una confirmación directa, los usuarios mencionan que la autoridad habría presentado denuncias por violencia política.
Los hechos evocan antecedentes similares en la Prefectura de Pastaza, cuando el ex prefecto Jaime Guevara retiró las funciones a la ex viceprefecta Cumandá Guevara, episodio que generó un fuerte debate sobre la autonomía y el respeto institucional.
De comprobarse la veracidad de las denuncias, este nuevo conflicto interno representaría un precedente negativo para la democracia provincial, afectando la imagen institucional del Gobierno de Pastaza.
Calapucha ya había expresado anteriormente su desacuerdo con el Prefecto en torno al proyecto de creación de una radio institucional, que se planeaba denominar “Radio Ánimo”, nombre vinculado al eslogan político de Granda. Tras la polémica, no se ha vuelto a hablar del proyecto.
