Ahora quieren la cabeza del Gobernador de Pastaza

El lunes 27 de junio, los dirigentes de las nacionalidades indígenas y los gremios, con una marcha, pidieron al Gobierno Nacional la remoción del gobernador de Pastaza, Stalin Ramos, a quien señalan como culpable de la muerte del comunero, Byron Huatatuca, quien pereció en un enfrentamiento con la Policía Nacional. Sin embargo, sigue el paro y las vías de acceso a la ciudad de Puyo siguen obstaculizadas.

El fin de semana, mediante acuerdo de los manifestantes y los representantes de los gremios se estableció un corredor humanitario que posibilitó el ingreso de combustibles y productos de primera necesidad tanto para el gas como para gasolina y diésel. Los usuarios hicieron largas filas y la mayoría que quedó sin abastecimiento. En tanto que los productos de la Sierra llegaron con precios elevados. Mientras tanto, los indígenas continúan en los lugares que se mantienen ocupando tanto la Gobernación como las vías de acceso y los puentes en el Picolino, Nueve de Octubre y paso al barrio El paraíso. Autorizan el paso peatonal, pero a los vehículos de manera restringida. Varios se quejan del maltrato y amenazas con las lanzas ancestrales. En las redes sociales se ven expresiones de descontento con las restricciones a la libre circulación que impide cumplir las actividades productivas. Por lo que rechazar la actitud de los indígenas, que violan los derechos de quienes necesitan trabajar. Incluso mencionaron que detrás de las movilizaciones se esconden intereses de grupos políticos relacionados con el expresidente Rafael Correa.