EXPERIENCIA
Los habitantes de la parroquia Guanando se encuentran tranquilos, ya que felizmente no hay problemas por contagio de coronavirus, señaló Segundo Díaz, presidente del Gobierno Parroquial.
Si bien el mayor número de moradores son adultos mayores y son los más vulnerables, pero felizmente no hay contacto con el exterior, pocas personas ingresan o salen de este lugar.
Cumplen actividades sobre todo para ayudar a las familias y evitar el contagio, sobre todo la desinfección de los sitios públicos y control de la ciudadanía que ingresa, los vehículos deben pasar por un espacio de desinfección.
Si bien es una vía alterna de tránsito a la provincia de Tungurahua pues se une a la altura de Cahuají Bajo, por eso el control es permanente.
Las carreteras si bien necesitan mejoras, pero con ayuda del Municipio y el Consejo Provincial se cumplió el trabajo de mantenimiento.
Una de las dificultades que tienen en la parroquia es la presencia de aluviones cuando las lluvias son fuertes y dañan las carreteras especialmente en las quebradas.
Las comunidades Guzo Grande y Cahuají están con las vías en buenas condiciones, pero se requerirá continuar con el mantenimiento sobre todo cuando llueve, se brinda atención en salud a los habitantes y felizmente no hay contagios de Covid-19.
En la parroquia son devotos del Señor de la Buena Muerte y con fe se siente protegidos, el templo está cerrado y cuando exista la disposición del COE y la Iglesia se reabrirá para que los católicos puedan acudir a ofrecer sus oraciones.
Añadió que legan con ayuda especialmente por cuatro oportunidades con alimentos a las personas pobres pero por autogestión también dotaron del gel y realizaron desinfección del templo, espacios públicos y vehículos, aquello gracias a la partida presupuestaria que hay en los gobiernos locales para los sectores vulnerables.(09)
