Mañana, 1 de diciembre se celebra el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, una enfermedad que no discrimina a nadie, pues todos estamos expuestos al contagio Esta fecha debe ser mirada como una oportunidad para crear conciencia colectiva sobre la importancia de la prevención y tratamiento de este enfermedad de la que nadie está libre.
Los gobiernos, las entidades y los organismos internacionales hacen lo suyo para detener esta epidemia, pero si la persona no toma en cuenta en sus actitudes y decisiones personales ciertas recomendaciones muy difundidas a nivel mundial, nada podrá detener el avance del mal. En este contexto, es bueno recordar que la principal forma de prevención es el uso del preservativo y una sexualidad responsable durante todas las relaciones…
Pero qué hay sobre los derechos de las personas que viven con VIH/ SIDA. En muchos casos, sufren de discriminación por el hecho de ser portadoras; se les niega el ingreso al sistema general de salud, la atención médica u hospitalaria y el suministro de medicamentos para su tratamiento; se dan casos que se les exige la prueba del VIH como requisito para acceder a un trabajo o a instituciones educativas y hasta son rechazados en ciertos lugares y empleos.
El desarrollo científico en el campo de la salud va atenuando el impacto psicológico y social que esta enfermedad conlleva. Sin embargo, es conveniente que, a nivel individual se exija siempre jeringas y agujas desechables en cualquier procedimiento clínico o quirúrgico, a tiempo de preocuparse por un diagnostico temprano de la infección para un oportuno tratamiento.