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El barrio La Dolorosa acoge al pesebre más grande de Riobamba; una muestra de religiosidad y devoción hacia el niño “Cubanito”, figura que es venerada por moradores del sector e integrantes del Club Social y Deportivo “Cuba”, que este año cumple 50 años.
Una tradición local que se mantiene latente y que cada año atrae la mirada de propios y extraños. Más de 2.000 piezas dan vida a este gigantesco Belén, en el que se conjugan cuadros bíblicos y resaltan artesanías, casas hechas de madera, nevados, un plaza de toros, iglesias y hasta una rueda moscovita; así también, se recrean algunos sectores turísticos y populosos de la ciudad. Durante esta semana, integrantes del Club y moradores del sector trabajan en el montaje del pesebre que se ubica en las calles Primera Constituyente y Cuba. Washington López, presidente del Club Cuba, resaltó que durante 50 años, esta tradición local ha permitido hermanar y unir a todas las familias del sector: “Queremos que la tradición no se pierda, la idea es que las nuevas generaciones y los moradores continúen con la tradición de uno de los barrios más reconocidos de la ciudad”.
De acuerdo a la programación, del jueves 15 al viernes al viernes 23 de diciembre, a partir de las 19h00, se desarrollará la tradicional novena, a la que acuden cientos de devotos a rendirle homenaje al niño Cubanito, con cánticos y oraciones. Mario Oñate, coordinador de los priostes de este año, realizó una invitación a todos los riobambeños a ser parte de la programación, en la que se incluye además el pase del niño que recorrerá las principales de la ciudad, un festival de música y la misa campal en honor a su patrono: “Son 50 años de incentivar la unión familiar y del sector. Estamos dejando un legado para las nuevas generaciones que desde ya están inmersas dentro de los preparativos y logística de todas las actividades planificadas”, acotó.
