Por: Hugo Moreno Romero
La Unión Nacional de Educadores Jubilados de Chimborazo saluda reverente a la mujer maestra jubilada en su día. No es una fecha cualquiera, se trata de rendir homenaje a la mujer, madre, abuela, maestra, profesional, ama de casa que entregó su vida por décadas al servicio de su familia y de la sociedad.
Su experiencia y sabiduría son el tesoro más valioso que las nuevas generaciones deben venerar y aprovechar su riqueza intelectual, espiritual y humana para defender y recuperar el verdadero valor de la mujer, de la vida y de la familia que es el sustento del presente y futuro de la sociedad.
Es fácil repetir miles de palabras, versos, mensajes resaltando su valor, pero qué difícil es defender en la práctica los valores y virtudes del ser más sublime creado por Dios. En la vida diaria asistimos con preocupación, rabia y molestia los actos de violencia intrafamiliar y social en contra de la mujer, discriminación en la función pública y privada y ataque desquiciado de los defensores de la equidad de género que desvirtúan el rol y la razón de ser de la mujer, como madre, esposa y ciudadana.
Loor a la mujer maestra jubilada que guarda en sus ojos y en su corazón la razón de ser de la humanidad y que se ha convertido en el nido de amor, paz y confianza que reciben sus nietos y bisnietos de sus estudiantes.
Un llamado a los hijos, cuidar del tesoro que son sus padres para que nunca los abandonen No necesitan flores cuando han dejado de existir sino cariño, apoyo, seguridad y cuidado cuando más necesitan de quienes tienen la obligación de cumplir con esta responsabilidad: sus hijos.
TU ESENCIA ILUMINA VIDAS Y TU FORTALEZA INSPIRA CORAZONES. ¡FELIZ DÍA DE LA MUJER MAESTRA JUBILADA!
