Mientras autoridades analizaban la clausura del nigth club “Mangos”. El “7 Pecado’s”, también pretendía abrir sus puertas, sin poseer ningún permiso.
Mientras Riobamba se encuentra a la espera de que se establezca una nueva zona de tolerancia, a las autoridades de control no les queda más que jugar al gato y al ratón. Cansados y molestos por los problemas que ha acarreado el desarrollo del trabajo sexual en el norte de la ciudad, moradores del sector, días atrás alzaron su voz de protesta e insistieron en la salida de todos los night clubs; sobre todo, de un tercer burdel que pretendía funcionar en la zona.
Clausura. El jueves por la noche, tras un operativo conjunto entre la Intendencia General de Policía, Municipio de Riobamba y Policía Nacional, se clausuró este centro de tolerancia llamado “Mangos”. Establecimiento que, de acuerdo a las autoridades, operaba sin ningún permiso de funcionamiento. Germánico Guerrero, intendente General de Policía, acotó que la medida corresponde a un acto administrativo, y la clausura se extenderá por 30 días: “si persisten en abrir sin obtener los permisos reglamentarios, procederemos a la clausura definitiva”.
Irregularidad. Lo que parecía ser el fin de la historia, autoridades de control recibieron una nueva notificación de que en el sector del Parque Industrial (av. Celso Rodríguez y Edelberto Bonilla) un nuevo nigth club, el “7 Pecado’s”, aparentemente pretendía abrir sus puertas. A simple vista, sus propietarios ultimaban detalles y adecuaban las instalaciones, indicaron las autoridades.
Xavier Espinoza, comisario Nacional de Policía, tras una inspección en el sitio, informó que el establecimiento tampoco cuenta con los permisos reglamentarios, y además las instalaciones no son las adecuadas. Espinoza indicó que extendieron una notificación a los propietarios, para una audiencia que se realizará el próximo martes: “ningún establecimiento abrirá si no cuentan con los permisos”.
Acciones. Pablo Romero, director de Ordenamiento Territorial del GADM de Riobamba, corroboró que el establecimiento no cuenta con ningún requisito para tramitar el permiso de funcionamiento. Además, enfatizó que la entidad no ha emitido ningún “uso de suelo” a ningún nigth club nuevo; y, los que han estado funcionado desde años anteriores, operan con un permiso provisional.
Romero indicó que hasta la Dirección llegó la denuncia sobre el nuevo burdel, e inmediatamente ofició a la Comisaría Municipal, para que en base a sus competencias, retire el rótulo. Además, a la Intendencia de Policía para que en base a sus competencias, de apresurarse o ejercerla actividad económica, proceda a la clausura. (12)
