En lo que debía ser una celebración en su Noche Amarilla en Quito, el equipo dirigido por Segundo Castillo sufrió una derrota por 3-2 ante Deportivo Quito, que no se dejó amedrentar por la diferencia de categorías y demostró carácter para imponerse.

Los “Chullas” marcaron el ritmo y aprovecharon los errores defensivos del Ídolo. Anthony Hurtado abrió el marcador y Frikson Borja, con un doblete, selló un primer tiempo impecable para los locales, que se fueron al descanso con una ventaja de 3-0. Barcelona, desconcertado y sin ideas claras, no logró imponer su juego y vio como la diferencia se ampliaba rápidamente.
Para el complemento, los toreros intentaron reaccionar. Con más empuje que claridad, lograron descontar a través de Janner Corozo y Valiente, generando expectativas de una posible remontada. Sin embargo, la solidez defensiva de Deportivo Quito y la falta de contundencia de los amarillos evitaron que el marcador cambiara.
El resultado supone un duro golpe para Barcelona SC, que vio truncada su fiesta, dejando dudas sobre su rendimiento de cara a la temporada. La derrota en la capital ecuatoriana se suma a otros antecedentes en los que el equipo ha tenido dificultades en su tradicional Noche Amarilla, como ocurrió en 2016 y 2024.
Mientras tanto, Deportivo Quito celebró una victoria con su ambición por volver al protagonismo del fútbol ecuatoriano. Más allá del resultado, el equipo de Sebastián Blázquez dejó en claro que, pese a la diferencia de divisiones, tiene la capacidad de competir ante los clubes más importantes del país.
Para Barcelona, aún hay mucho por corregir antes del inicio de la competencia oficial. La Noche Amarilla terminó oscura y con muchas interrogantes que el cuerpo técnico deberá resolver en las próximas semanas.