Los habitantes y algunos comerciantes colindantes con el mercado Oriental, aún esperan que el control o el orden público sea frecuente en esa zona.
Más que nada en los días de feria, ya que, al existir un mini terminal, y el flujo vehicular se intensifique y genera problemas no solamente a los que venden productos, sino también a los transeúntes.
“Antes se cerraban las calles y se peatonizaba el sector, sin embargo, no se sabe qué pasó, ya que incluso la presencia de los agentes civiles de tránsito y de agentes municipales no es visible, en especial en la tarde y noche”, mencionó Pablo Burgos, transeúnte que estaba por el sector.
Burgos también resaltó que un problema vial que no solo pasa en los días de feria, es que los buses que van con pasajeros sea a Químiag o a Penipe, se parquean en zonas que no permitidas, generando así, congestión vial.
En cambio, Rosario Cabezas, comerciante, mencionó que en la avenida Cordovez, se siguen utilizando las veredas como estacionamientos y por ese espera que hay más control.
“El trabajo de los agentes se ve en los sábado, sin embargo en la noche y en los demás días, al no existir control, hay conductores que abusan de la normativa”, subrayó Cabezas.
