TURISMO
El pasado 20 de febrero 2025, el viceministro de Servicios del Transporte, Camilo Ruiz, acompañado por un equipo de expertos en materia ferroviaria del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), sostuvo una serie de reuniones en Chimborazo para impulsar la reactivación del sistema ferroviario en la histórica ruta Alausí – Simbambe, también conocida como la Nariz del Diablo, un trayecto de 12 kilómetros de gran relevancia turística y cultural.

Durante la visita, el viceministro participó en una mesa técnica con el gobernador de Chimborazo, Guido Puyol, y el equipo del Municipio de Alausí, encabezado por el alcalde Remigio Roldán. En este espacio de trabajo se discutieron los detalles legales, administrativos y comerciales necesarios para implementar el modelo de gestión que permitirá el funcionamiento del tramo ferroviario.
Esta planificación avanzó con la socialización de la firma de las actas de entrega-recepción de los bienes del ferrocarril al MTOP, lo que facilita la continuación del proceso administrativo para el inicio de las operaciones.
Además, el grupo de trabajo, junto con autoridades locales y habitantes de la zona, verificó de manera directa las actividades de mantenimiento de la línea férrea, las estaciones y el material rodante, cruciales para garantizar la seguridad y funcionalidad del sistema. En este sentido, el viceministro Ruiz destacó el compromiso del Gobierno de El Nuevo Ecuador de poner en marcha el ferrocarril de Alausí para el disfrute de turistas nacionales e internacionales a finales del primer trimestre de 2025.
Por su parte, Marcelo Orellana, habitante del barrio Eloy Alfaro, expresó su satisfacción al señalar que “de a poco se va cristalizando el sueño de los alauseños de contar con el ferrocarril, que nunca debió desaparecer, pues es parte de nuestra identidad y memoria histórica, y representa un motor para la economía del cantón, la provincia y el país”.
Finalmente, el MTOP y el Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) de Alausí acordaron una hoja de ruta para el traspaso de uso y ocupación de los bienes ferroviarios, con el objetivo de que Ecuador recupere el sonido del tren recorriendo la ruta de la Nariz del Diablo, una de las atracciones turísticas más emblemáticas del país.