Las estudiantes de la Unidad Educativa Santa Mariana de Jesús de Guaranda, formaron una calle de honor hasta el altar mayor la eucaristía.
Miles de fieles católicos concurrieron a la misa campal presidida por el obispo de la Diócesis de Guaranda, Skiper Yánez que se desarrolló en la explanada del santuario de la Virgen de El Guayco, en homenaje a la Madre de Jesucristo. Los fieles católicos con sus hijos en brazos, otros en sillas de ruedas, descalzos, con muletas llegaron al santuario para pedir alivio a sus dolencias, otros para agradecer por los favores recibidos, no faltaron aquellos que llegaron por conocer el santuario y hacer turismo religioso.
Para la misa campal, las estudiantes de la Unidad Educativa Santa Mariana de Jesús de Guaranda formaron una calle de honor en su recorrido en hombros de los devotos hasta el altar mayor levantado al pie de la puerta principal de la iglesia. La sagrada imagen recorrió el trayecto en medio de rezos, cantos religiosos, juegos pirotécnicos y aplausos.
El lugar resultó chico por la cantidad de vehículos y personas que acudieron para celebrar el aparecimiento de la Virgen a la niña Luz María Chela hace 310 años. Los espacios destinados al aparcamiento vehicular estaban totalmente saturados y el ir y venir de alrededor de 100 motociclistas, provenientes especialmente de la costa (Montalvo-Babahoyo-Los Ríos), (Balzapamba, Pisagua, Caluma-Bolívar) hacían sus recorridos entre el Santuario, San José de Chimbo y Guaranda para disfrutar del paisaje de la serranía, mencionaban varios de ellos, dejando de lado el frío de la Sierra.
En la fiesta religiosa, los comerciantes también tuvieron su espacio para ofrecer platos típicos, refrescos, hornado, las tradicionales tortillas de trigo y maíz; y, otros productos preparados. Algo novedoso para los turistas y que no hay en otro lugar del país son los “bollos”, en base al orito, (fruta) convertido en masa es cocido en hornos de leña, su sabor es dulce y es preparado solamente en estas fechas, traen desde Caluma. Para el frio de la noche, cobijas de todos los colores y precios, ropa, zapatos, juguetes. El lugar se convierte en un gran centro comercial.
La fiesta en honor a Mami Nati, como le llaman sus fieles, dio inicio los últimos días de agosto con la novena y se extendió hasta la primera semana de septiembre. Durante estos días se realizaron romerías desde el subtropical bolivarense y de la serranía, donde los feligreses caminaron largas horas en medio de cantos y plegarias, junto a ellos la Policía Nacional y los organismos de auxilio. (30)
