EDITORIAL

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on whatsapp
WhatsApp
Share on email
Email

Accidentabilidad en las vías

Los accidentes de tránsito son recurrentes a nivel nacional, muchos de ellos causados por conductores en estado etílico que, sin la menor preocupación y con la mayor irresponsabilidad individual y social circulan poniendo en riesgo su propia vida y de los demás. Aquí en Riobamba, solo en lo que va de este mes, han ocurrido varios accidentes con saldo de muchos heridos y  fallecidos.

La ciudadanía se encuentra conmovida   a nivel nacional por la información que da, casi a diario, el Ecu 911    sobre los accidentes que ocurren constantemente en todo el territorio ecuatoriano, donde las carreteras ecuatorianas se visten de luto y la sangre de niños, jóvenes, madres, ancianos, sigue corriendo a raudales a causa de exceso de velocidad, irrespeto a las señales de tránsito, manejo bajo efectos de alcohol y estupefacientes y otras irresponsabilidades. Súmese a esto el mal estado de ciertas vías como la Balbanera-Pallatanga Bucay, conocida como la “carretera de la muerte”.  Por lo visto, el ECU 911, las ambulancias del Ministerio de Salud Pública, las patrullas de la Agencia Civil de Tránsito y las unidades de rescate del Cuerpo de Bomberos tienen con frecuencia   días ajetreados   para atender emergencias viales.

¿Cuál es la causa más recurrente que lleva dolor y lágrimas a miles de hogares ecuatorianos?   La Agencia Nacional de Tránsito (ANT), ha señalado que es el irrespeto a las señales de tránsito por parte de los conductores, particularmente del chofer profesional, quien tiene una altísima responsabilidad social en sus manos, ligada a la vida misma, la suya, la de su familia y la de sus clientes o usuarios.

El tema, sin duda alguna, reviste una importancia vital, y la ciudadanía debe involucrarse, desde la prevención, la educación y la cultura para colaborar con la policía; pero, sobre todo, en el respeto de las leyes para evitar el llanto y la tragedia que, desde la imprudencia, el alcohol, el exceso de velocidad, el imprudente uso de celulares, en suma, desde el irrespeto a las leyes de tránsito, rompe la paz y tranquilidad de los hogares ecuatorianos.

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on whatsapp
WhatsApp
Share on email
Email