Las mujeres embarazadas afiliadas al IESS de Riobamba, ahora podrán acceder sin cita en el Call Center para la atención en el área de nutrición sin previo turno, con solo acercarse a la Unidad de Gestión de pacientes. Esta estrategia pública que se da a conocer en beneficio de este grupo vulnerable asegura una atención oportuna con médicos especialistas en lo que corresponde a ginecología. Es una buena noticia por parte de la Dirección médica del IESS.
Se merecen eso y mucho más quienes cumplen la misión sublime de engendrar, de multiplicar la especie humana, de convertirse en heroínas de la humanidad en función de la maternidad.
¿Porqué no extender una estrategia similar a los afiliados al Instituto de Seguridad Social de la tercera edad? Cuando este sector vulnerable acude a los dispensarios de IESS en procura de atención médica se encuentran dolorosamente ante un proceso marcado por alternancias entre atenciones, esperas y postergaciones, sin contar con las toma de muestras, exámenes, resultados, consulta con el especialista, de suerte que, entre la primera visita por alguna enfermedad que generalmente es urgente en esa edad y resultados finales, debe esperar algunos meses hasta conocer la gravedad de su enfermedad y las alternativas terapéuticas e iniciar los respectivos tratamientos, si es que en ese víacrucis no les ha llegado el fin. No hay que olvidar que constitucionalmente las personas adultas mayores deben recibir atención prioritaria y especializada en los ámbitos público y privado.
Hay que decirlo, los servicios médicos y hospitalarios del IESS, durante muchas décadas ofrecieron atención excelente y oportuna, tanto interna como externa; nunca faltaron medicinas y el trato a los pacientes por parte de distinguidos profesionales era de primera. Lamentablemente, en el tema de la salud, , en los últimos años, a criterio de analistas y afiliados, “el sistema parece agotado, sobresaturado y desbordado” como consecuencia de políticas inapropiadas, demagógicas y antitécnicas por parte de gobernantes de turno que hicieron de los fondos del IESS caja chica y de directores irresponsables y corruptos.