El pastor del Vicariato de Puyo Mons. Rafael Cob cumplió su visita apostólica a estas comunidades alejadas. A pesar de la pandemia, llegó a estas tierras de misión e impartió los sacramentos a decenas de niños y jóvenes. Viajó en canoa, observando los efectos devastadores de la creciente del río Bobonaza.
En Pakayaku, el Obispo bendijo la nueva casa de Misión recién construida. Diez chicos hicieron la primera comunión y 14 jóvenes recibieron la Confirmación. En este lugar vivió varios años la Hna. María Martín. No asistió debido a la dificultad de acceder al poblado porque se cayó el puente en la crecida del río.
La siguiente parada del Obispo y los misioneros acompañantes fue la parroquia Sarayaku. El Obispo cuenta con tristeza el consumo de licor y brotes de división en la comunidad. Con motivo de la pandemia han ingresado curanderos, licor y grupos religiosos. Aquí era prohibido ingresar licor, y ahora ha crecido la violencia intrafamiliar, sostiene Rafael Cob.
En Sarayaku también se han celebrado los sacramentos de bautismo, primera comunión y 25 confirmaciones. El Obispo visitó a los padres de Patricia Gualinga, primeros catequistas. En su homilía animó a la comunidad a defender la unidad de la fe y evitar el consumo de licor que tanto daño causa las familias.
La Sra. Patricia Gualinga asistió a los actos, ella es una de las lideresas indígenas que participó en el Sínodo Amazónico.
