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jueves, marzo 27, 2025

¡Patria o agonía!

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Por: Pablo Granja

En 1979, Margaret Thatcher asumió la jefatura de gobierno de Gran Bretaña en medio de una estanflación, crisis laboral y económica, en gran parte por el excesivo paternalismo del Estado. Tenía muy claro por donde debía transitar su gestión para revertir esta dinámica ociosa, que alejaría a su nación de la retórica mentirosa pero efectiva del socialismo que destruye los valores y principios de la democracia. Para ello implementó reformas con gran temple y firmeza, lo que le valió el apelativo de la “Dama de Hierro”. “Los marxistas se levantan temprano por la mañana para defender su causa. Nosotros debemos levantarnos aún más temprano para defender nuestra libertad”, dijo.

Esta frase no puede ser más oportuna en las actuales circunstancias, ante una segunda vuelta para la cual el socialismo del siglo XXI viene trabajando sin descanso en su afán de recuperar el poder; mientras el Gobierno demuestra que se preparó para ganar en una sola vuelta confiado en su suficiencia insuflada por encuestas mentirosas; mareados, quizás, por ser un partido joven que ganó inesperada y prematuramente. Si bien ha tenido que lidiar con factores muy adversos, la magnitud de la crisis trató de enfrentar con cuadros jóvenes, seguramente bien preparados en prestigiosas universidades, desdeñando el apoyo del “viejo Ecuador” que con su experiencia podía haberse conjugado con el espíritu joven y entusiasta, pero teórico de las nuevas generaciones. También ha faltado la suficiente sensatez como para recurrir al apoyo de un sector del país que ha enfrentado al socialismo con determinación, refiriéndome a la Sierra concretamente, que conoce con certeza lo que significa el regreso de la vieja ideología fracasada y que ahora en boca de sus candidatos nos ofrecen: revisar los juicios por corrupción que pesan sobre los exfuncionarios, para que regrese el odiador más grande de la historia; una abierta identidad con el Gobierno de Maduro; imponer un impuesto a las familias que tengan más de dos hijos; actualizar la tabla de consumo de drogas incluyendo al fentanilo, que convierte en zombies irreversibles a quienes lo consumen; instaurar una tarjeta de racionamiento alimenticio como en Cuba y Venezuela, que convierte a la gente en dependiente del Gobierno; estimular con financiamiento del Estado la transición de género de jóvenes y adolescentes; desdolarizar la economía para reactivar el proyecto de una nueva moneda que terminará circulando únicamente entre países socialistas, mientras los dirigentes amasan sus fortunas en moneda dura.

La sociedad que quiere mantener el derecho de cuidar y educar a sus hijos distantes de prácticas insanas, alejados de la drogadicción y la desesperanza, que quiere gozar de libertad, debe tomar conciencia que el grito “Patria o muerte” de los comunistas es una promesa certera de una muerte lenta, de muy lenta tortura y crueldad, que nos obliga a activarnos para salvar al país, hogar de nuestros hijos y nietos, por lo que debemos escoger entre “Patria o agonía”.

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Ataque más que debate

Como es conocido, el debate es una técnica de comunicación que consiste en la confrontación de ideas u opiniones diferentes, a veces contrapuestas, sobre un