En Puyo, la clase trabajadora celebró el Primero de Mayo sin discursos ni desfiles. La cuarentena y el confinamiento, marcó el Día del trabajador casi en silencio. Excepto la difusión de contenidos reivindicativos en redes sociales.
Ninguna delegación llegó a la Plaza Roja, este primero de mayo, donde durante a las 4 décadas pasadas hubo manifestaciones. Dirigentes sindicalistas, de la UNE, y de partidos políticos de izquierda organizaban marchas con banderas y consignas contra el Gobierno y los poderes dominantes.
Los medios de comunicación difundieron la preocupación generalizada de la gente por salir cuánto antes de esta la pandemia del coronavirus y las consecuencias pos cuarentena. La carestía es notoria en los hogares y los empleados y trabajadores tienen la preocupación de perder sus puestos.
En Pastaza los comerciantes y emprendedores ocupan un importante porcentaje poblacional, la mayoría en estos más de 40 días de confinamiento ven que sus negocios van a la quiebra. No tienen ventas, ni recursos para pagar los arriendos, ni para remuneraciones a sus colaboradores, ni los créditos en los bancos.