Al menos 500 damnificados de los cantones de Chunchi, Alausí y Cumandá, están angustiados por las pérdidas. 
Municipios de Chimborazo, la Prefectura de la provincia y demás entidades públicas e incluso privadas, se han unido para ayudar a los damnificados del deslizamiento de tierra que se registró el viernes pasado en el sector de La Armenia-Chunchi.
Por ejemplo, para cuantificar y recabar datos de la magnitud del desastre natural, se han hecho varios sobrevuelos, que demuestran que aún existe agua represada.
Gladis Guadalupe, afectada, aún recuerda lo que pasó, y narró que fue como si una ola de fuego, tierra y agua se les fue encima, terminando así con un poblado.
Jorge Galárraga, comandante de la Brigada de Caballería Blindada N. 11 “Galápagos”, manifestó que la asistencia ya no solamente ha sido con la colaboración de personal, sino de transporte para rescatar las partencias de los afectados al igual que los animales que han sobrevivido.
Gran cantidad de ciudadanos han ido a los albergues improvisados en los municipios de Alausí y Chunchi, mientras que otros han optado por casas de acogidas de algún familiar o amigo.
Oswaldo Flores, hijo de la mujer que sobrevivió a la tragedia, nuevamente pidió ayuda porque su familia se quedó sin nada. (25)
